Postre Der Letzte Kuss
Por Madame Papin
¿Por qué será que cuando uno está a dieta tiene una imperiosa necesidad de comer dulces, postres? En fin, en dieta o en línea esta receta es la respuesta a los escandalosos pedidos de la semana después de una simple foto jajjaja!!
Relax, cocinaremos un súper postre, te sugiero comerlo con auriculares y… Der letzte Kuss, de Die Toten Hosen!! Verdaderamente un viaje de ida, porque la vuelta va a ser la patada que te darán los que estén con vos al ver como disfrutas del mismo.
Manos a las cacerolas, otro favor no cambiar ningún ingrediente!, si digo dulce de leche Las Quinas, no estoy pasando un chivo, creo que es el indicado para esta receta, si después digo vitamina R es ron y no se cambia por oporto o moscato o que se yo ¿ok?
Y sí, alguna vez tenemos que hacer caso a lo que dice la receta.
Cortamos las peras con o sin cáscara y las acomodamos en una placa que pueda visitar el horno junto con unos daditos de manteca, azúcar rubia, canela, una mínima pizca de comino, unas tres semillas de cardamomo aplastadas, coco rallado, cáscara de lemon y un hilo de aceite de coco y avena gruesa.
Genial ahora al horno hasta que se dore. Sí, ya se: viste el perfume invadió tu cocina! Vamos bien.
Retiramos y dejamos que tome temperatura ambiente.
Ahora la segunda y última cocción de este postre: mi versión de crema pastelera o como quieras llamarla: en una cacerola tiramos la leche junto con el azúcar, los huevos: batimos; entra la cáscara de limón, y Maicena previamente disuelta en un poco de leche, vamos al fuego revolviendo en ocho, dice Ronnie para que no se hagan grumos. Cuando tomó el punto justo que todos conocemos de la pastelera retiramos del fuego y in dis moment agregamos la manteca.
Armado : en una copa, frasco, compotera, o botella de lo que tengas, destrozamos una vainilla, rociamos con una cucharada de vitamina R, agregamos una cucharada generosa de dulce de leche, abundante crema pastelera y por último las peras.
Y como dicen los Hosen todos necesitamos un último beso!!
Más que buen provecho
Madame Papin